En sus conciertos logran generar una atmósfera de suspenso y realizan "explosiones extáticas" únicas que en esta nueva faceta de su carrera perfeccionan sin dejarse condicionar por la expectativa del público.
El cantante Cedric Vixler, con sus movimientos sinuosos y andrógenos, domina el escenario sumido en un trance profundo y logra realizar un performance admirable. Su voz es potente.
Esta canción se llama "The Moon" y fue filmada este año por un aficionado en un concierto en Helsinki, Finlandia; la canción entera se asemeja una gran erupción volcánica de "éxtasis ininterrumpido" que comienza con una introducción lenta para en el minuto 6 explosionar hasta el minuto 10 y luego comenzar su descenso...
Definitivamente nos encontramos acá con una banda que se introduce de lleno en un "misticismo salvaje" y que maneja muy bien lo que Eliade llamó las "técnicas arcaicas del éxtasis", pero en una versión contemporánea y profana claro está.
Acá otra canción de las antiguas, The Widow, más "digerible" (pop) y con un muy buen video:
Esa música es satánica. ¡Puras disonancias!
ResponderEliminarJa ja pero a ti te gusta Moby! Es lo mismo, un vicio profano. Reconozco que tengo una debilidad por ciertas formas transgresoras de éxtasis, como de hecho lo es el rock & roll, pero son muy pocas bandas las que me agradan en realidad. También encuentro este género musical estridente y lleno de disonancias, pero el elemento eléctrico de los amplificadores es una novedad que no existía antes y que resulta interesante para la producción de estados extáticos, por más que sean orientados en dirección descendente y no ascendente. Como fenómeno es interesante. Lo importante me parece es distinguir o saber reconocer entre las formas inferiores de misticismo y las superiores.
ResponderEliminarGracias Patricia, cualquier cosa me comunico con ustedes.
ResponderEliminarsaludos